Más de cien horas de vida invertidas en Skyrim, algo así como treinta en Oblivion y por desgracia, (o falta de PC), no más de diez en los primeros tres Elder Scrolls. Sin embargo eso no me ha quitado la afición y amor inmesurable por esta saga que más que épica, la considero como legendaria, que ahora da un nuevo brinco al formato de multijugador masivo en línea.
The Elder Scrolls Online es más que un juego en mi opinión, es más bien como un logro en la industria de los videojuegos por las posibilidades que nos da a los gamers: Explorar Tamriel de principio a fin, junto con otros miles de guerreros. Esto es The Elder Scrolls Online, un multiplayer online con la oportunidad de crear clanes y sortear toda clase de batallas en el fantástico mundo creado por Bethesda. Suponen entonces que mi sangre de dragón hirvió cuando me llegó el correo con la invitación a probar la beta, la segunda tanda de participantes en el mundo tendría entre ellos, a un servidor.
Como un videojugador enfocado por compartir mis vivencias y experiencias, decidí hacerlo una vez más para que ustedes sepan qué nos depara en los próximos meses con este esperadísimo título, y no pierdan la oportunidad de vivir un juego como pocos.
La historia de The Elder Scrolls Online
Siendo honestos, de la trama no se da mucha información, en realidad es más bien como una introducción diminuta para que tampoco se nos revele todo lo que nos espera, aunque sí deja bien en claro la situación de que estamos presos en algún lugar y las razones de esto. Es la segunda era de Tamriel, en el año 582. Nos encontramos en Coldharbour, uno de los planos de Oblivion y tierra del príncipe daedra, Molag Bal. Hemos sido despojados de nuestra alma al ser sacrificados en una especie de ritual. Y una vez que despertamos, es hora de escapar de ahí, con la ayuda de “El Profeta”.
Durante el tiempo que pude estar avanzando en la trama, y en la forma de contarse, no hay mucho cambio con respecto a Skyrim: hablar con personajes dentro del juego que nos empiezan a contar acerca de su vida, problemas y necesidades, para insinuarnos que requieren la ayuda de alguien, y es ahí donde con la clásica forma de platicar con los demás, es como nos ofrecemos a asistirlos y una misión se generará. Igualmente puede ser vista en el mapa para dirigirnos a ahí.
Hasta el momento, y suponiendo que aunque sea beta no va a cambiar mucho; las ramificaciones en la historia siguen agrandando más el universo de Elder Scrolls, así como también no existe relación alguna a la historia del Dovahkiin (o el sangre de dragón). Por lo pronto, así es y no encontré indicios de que fuera esto a ser diferente, aclarando que en documentales de los desarrolladores,comentan que no es una continuación de los hechos en la quinta entrega. Lo que sí me encantó de la versión de prueba es cuando “El Profeta” nos invita a salir a Tamriel y explorarlo, para irlo conociendo y hacernos expertos en la batalla. Fue como el permiso que esperaba oír para acabarme el mapa, por más grande que sea.
El entorno de Tamriel
Mi experiencia en The Elder Scrolls Online la divido en dos etapas: antes y después de entrar a Tamriel. Es inevitable hacer este comparativo por el ambiente de Oblivion, el cual es muy oscuro, infestado de Atronach y otras tres especies que de manera muy indecisa nos van a atacar. Casi toda esta parte se desarrolla entre cavernas que hacen el papel de cuartel y cárcel con una que otra trampa, además de contar con varias partes donde los esqueletos y sangre no se hacen esperar. Se nota que estamos en otra dimensión poco amigable y diseñada para quienes tienen que cumplir alguna condena.
Una vez libres, todo vuelve a ser como ya lo conocemos: extensas praderas infestadas de rocas y árboles, montañas de poca altura (Skyrim nos acostumbró a picos altísimos) y animales, aunque carentes de variedad. Solo me encontré con osos, cangrejos, pirañas y unas resplandecientes y familiares arañas. Todos los animales son demasiado sencillos de matar, aunque estoy seguro y quiero creer que fue por ser una versión beta, y que en la definitiva costarán mucho más sudor y sangre.
Como ya sabíamos, The Elder Scrolls Online nos presenta un mundo abierto que nos deja explayarnos por todo el territorio sin limitarnos más que al mapa establecido, y por supuesto que cuenta con suficiente mar para darnos un chapuzón con el mero fin de probar todo lo que se nos ofrece, aunque a decir verdad, quedó un poco a deber. Es entendible que por ser una beta le falten o fallen detalles, pero siento que pudieron llenar de criaturas y enemigos para atiborrar el servidor, que era lo que precisamente buscaban: tirarlo con la mayor cantidad de jugadores y bestias en línea que se pudiera. Esta era la verdadera finalidad de la invitación por parte de Bethesda, probar sus servidores.
Encontré cuevas con varios cofres los cuales estaban “llenos” de objetos para mi personaje, y con esto me refiero a que había a lo mucho diez monedas de oro y hachas de todos tipos, con suerte encontré dagas que hacían la misma labor de un mondadientes. Afortunadamente ahora podemos picar piedra en automático para recolectar materiales, sin la necesidad de cargar con una herramienta especial, la cual antes teníamos que conseguir, ya fuera robada o comprada.
Por suerte encontré un entorno no tan distinto a Skyrim, el cual es para muchos, uno de los mejores en los videojuegos, pues casi no le falta nada, y al contrario le sobran locaciones y actividades para el jugador. Considero que para la beta fueron muy controlados en las posibilidades del territorio, pero insisto, creo que no lo cargaron para no eliminar el factor sorpresa en el producto final.
Los personajes de Tamriel
De inicio tenemos tres alianzas a las cuales podemos pertenecer: El Pacto de Daggerfall, El Dominio Aldmeri y El Pacto de Ebonheart. De ahí decidimos cuál raza queremos ser: bretón, alto elfo, argoniano, orco, elfo del bosque, elfo oscuro, guardia rojo, khajiit y nórdico. Cualquier sexo y apariencia, igual que en los anteriores. Esto no cambió, pero el menú de progreso del personaje sí sufrió varias alteraciones que aún no me convenzo si fueron para bien o para mal.
Todo el menú de selección de habilidades, armas, mejoras en el personaje y equipamiento es, aparte de confuso al inicio, poco atractivo, y aunque tal vez sí es un poco más práctico que el de Skyrim, me parece que en diseño fueron un paso atrás… O hasta dos. Sigue estando todo separado por tipo de objeto, ahora de manera horizontal y distinguido por un ícono, sin embargo una mala alineación de cómo van apareciendo provoca que por momentos confundamos lo que estamos usando con lo que estamos guardado. Con el tiempo podríamos acostumbrarnos, pero no sé qué tan rápido.
No conformes con eso, tenemos una barra principal con las misiones, mapas, mensajes, libros, etc, la cual se encuentra hasta arriba de la ventana: han unificado inventario, habilidades y mapa en un solo menú. No lo encuentro para nada útil. Recuerdo pocos árboles de poderes y magia tan hermoso como el de The Elder Scrolls V.
El mapa. Retroceso en todas direcciones. ¿Recuerdan el bellísimo trazado que se alzaba en Skyrim donde casi podíamos lamer la nieve de Hibernalia? Se acabó. Se cambió todo por una especie de pergamino con pequeños marcadores inanimados que solo están ahí, como si el juego hubiera sido diseñado inspirándose en el título de Oblivion. Me decepcioné, pues a veces solamente me gusta abrir el mapa y ver todo lo que he descubierto en la anterior entrega.
Sigo viendo la mecánica de pelea algo torpe por momentos, pero no quiero criticar, de hecho nunca me ha molestado la manera en que se dan los combates cuerpo a cuerpo, a pesar de que no es el mejor que he probado. Podemos estar seguros que no tendremos que acostumbrarnos a nuevas formas de pelear y usando las mismas técnicas que ya teníamos podremos vencer a los rivales. Como ya había comentado, en varias ocasiones sentí muy fáciles a los oponentes, ya que esa inteligencia que tenían de encontrarnos donde fuera, no es tan latente, y comprobé que no se dan cuenta de uno a sus espaldas, por lo que eliminarlos fue pan comido.
Tamriel también tiene bugs
Desde un principio que tuve el código de descarga sabría que vería decenas y decenas de errores por todo el juego, y no es para alarmarse ni nada, pues las betas así funcionan. Y en verdad no me quejé en lo absoluto de cada uno de los que encontré porque efectivamente, los busqué incansablemente por todos los rincones en los que anduve por Tamriel. Haré un breve resumen. La descarga de The Elder Scrolls Online ocupa 30 Gb en disco duro, y fue hasta el momento en que se había descargado al 90 por ciento, que el programa se dio cuenta que mi Mac no tenía suficiente espacio, por lo que canceló y borró todo el avance; de nuevo a descargar una vez que había desocupado memoria. El modo en primera persona no es opcional, simplemente aparece cada vez que el juego se le ocurre. Cuando el personaje tiene ciertos objetos a su espalda, o está parado en alguno, en ocasiones la vista cambia de poder observar al guerrero o estar en primera persona. Esto me molestó mucho, pues varias veces lo hizo estando en pleno combate.
Hubo una ocasión en que ninguna criatura me atacó por más que les intenté pegar, de hecho su barra de salud no se movió en lo más mínimo. Estaban en estado inerte y volteando hacia un punto fijo, como si no se hubieran cargado correctamente los archivos del juego. En las misiones que se pueden ir realizando en Tamriel,me encontré con que estaban truncas, o no había una siguiente acción, es decir, las puertas de los lugares no se abrían, no se encontraba el personaje que buscábamos o lo que pretendíamos hallar no estaba marcado para identificarlo, como en Skyrim, que una señalización nos avisaba que a esa persona teníamos que acudir. Esto me dificultó terminar algunas partes del juego. Para finalizar con los bugs de The Elder Scrolls Online, hubo dos cosas muy curiosas: pude caminar en el agua durante unos siete u ocho pasos, hubo rocas que podía sortear, y otras que me impedían avanzar.
Mi conclusión de Tamriel
Estoy seguro que cada error que encontré no significa mala calidad en el producto, pues probablemente hayamos visto en verdad un alfa del juego que Bethesda nos dio a todos para simplemente probar servidores y su confiabilidad. Dudo que faltando tan poco tiempo para su salida al mercado, esté en condiciones no aptas para su venta. No digo esto al aire, sino porque el éxito de esta compañía está basada en la calidad que entrega al usuario final. Sé también que Skyrim inició con una infinidad de fallas en sus mapas, movimientos, acciones, misiones y seguimiento de las mismas, las cuales fueron arreglando con parches para el juego. Confirmé con la beta de The Elder Scrolls Online que Bethesda sabe bien lo que está haciendo, y confío plenamente que lo mostrado fue solo un piloto muy al vapor con la mera intención de que ellos revisaran sus equipos.
Días después de haber concluido el periodo de prueba, me llegó un correo electrónico con una encuesta acerca del rendimiento, ejecución y contenido del juego. Fue larga y meticulosa, haciendo hincapié en todos los aspectos que The Elder Scrolls Online ofrecía solo en la beta y que muchos jugadores no pudimos experimentar debido a la falta de tiempo. Confirmado, lo que pudimos explorar fue muy poco comparado con lo que nos tienen preparado.
The Elder Scrolls Online saldrá en PC y Mac (el 4 de abril), así como en Xbox One y Playstation 4 (en junio de este año). pueden estar seguros que tendremos su reseña aquí, en Anim-Arte.com.