La película surcoreana Pietá, del director Kim Ki-duk (Samaritan Girl, 3-Iron), ganó el León de Oro, el principal premio de la 69ª Muestra Internacional de Cine de Venecia. Considerada desde el inicio una de las favoritas, Pietá es una cinta violenta, que muestra la perversión de las relaciones humanas en una sociedad en la que el dinero es el motor de todo.
El León de Plata, al mejor director, fue para el estadunidense Paul Thomas Anderson, que presentó The Master, otra de las películas favoritas en la competencia e inspirada en la secta de la Cienciología. Los protagonistas de The Master, Joaquin Phoenix y Philip Seymour Hoffman, ganaron la Copa Volpi a la mejor actuación masculina, mientras el galardón para la mejor intérprete femenina fue para la israelí Hadas Yaron, protagonista de Fill the Void.
El Premio Especial del Jurado fue para Paradise: Faith, del austriaco Ulrich Seidl, que relata la historia de una fanática católica e incluye una polémica escena en la que la protagonista se masturba con un crucifijo.
El Premio Marcello Mastroianni al mejor actor joven, fue para el italiano Fabrizio Falco, protagonista de dos filmes presentados en Venecia, E Stato il Figlio, de Daniele Cipirí, y La Bella Addormentata, de Marco Bellocchio. Esa última película, que aborda el polémico caso de Eluana Englaro, la mujer que permaneció en coma vegetativo por 17 años antes de que un juez permitiera “desconectarla”, se presentaba como una de las favoritas, pero al final decepcionó a la crítica y al jurado.