Hoy hace exactamente diez años, el japonés Daigo Umehara cambió para siempre la imagen de la competición profesional en los videojuegos. El llamado Momento Evo #37 celebra su décimo aniversario, una exhibición de reflejos y habilidad cuasi ninja con el joystick que lo llevó a recuperarse de una derrota aparentemente imposible de evitar, ante el estadounidense Justin Wong.
Usando el parry -movimiento donde en lugar de defender hacia atrás, como normalmente se hace hace para bloquear en los juegos de peleas, pulsas brevememente la palanca hacia adelante para absorber el daño y contraatacar-, Umehara neutralizó por completo el súper poder de varios golpes de Wong y su Chun Li, para después atizarle un combo que le daría la victoria en el primer encuentro de la semifinal de Street Figter III: 3rd Strike, en el EVO 2004.
Aún hoy el video, con la leyenda “La Bestia es liberada”, sigue poniendo la carne de gallina y más al saber que lo realizó en un momento decisivo junto al público que se escandaliza delirantemente. Gócenlo una vez más en versión remasterizada a 720p.
https://www.youtube.com/watch?v=Lq1ey4-ewyQ
Después de esa tremenda exhibición, Umehara se llevó el torneo y la admiración mundial de propios y extraños. Convirtió el EVO de un pequeño evento a un monstruo mediático que reúne no sólo a los mejores jugadores del género, sino a compañías deseosas de mostrar sus nuevos títulos.
El Momento EVO #37 ha tenido homenajes en anime, infografías descriptivas, homenajes live action, comparaciones con la jugada donde Maradona se lleva a seis ingleses para meter gol en 1986 y hasta un libro escrito por Glenn Craves, que destaca el parteaguas que fue para el gaming competitivo.
Así como Billy Mitchell se estableció entre los 80 y 90 como el mejor jugador del siglo pasado, así Daigo Umehara fue reconocido posteriormente como el mejor de todos los tiempos en títulos de pelea, y aunque este último EVO se fue sin calificar siquiera a la ronda de los ocho mejores, su legado sigue vigente.