La saga de sigilo por excelencia siempre ha sido Metal Gear Solid, franquicia que surgió en forma en la original PlayStation, pero que existe desde la poca conocida consola MSX y la NES. La competencia de Hideo Kojima está muy lejos de ofrecer lo que las aventuras de Snake representan, tanto así que Metal Gear Solid V: Ground Zeroes es prácticamente una demo que se vendió como juego, no completo, pero finalmente era imposible haberlo ofrecido de manera gratuita dada la infinidad de horas que podemos pasar en la misión sin aburrirnos.
Metal Gear Solid V: Ground Zeroes
Hideo Kojima (productor, creador, director y escritor del juego) es uno de los genios más importantes de la industria si nos referimos a la forma de contar historias, además es un desarrollador muy cuidadoso con su saga estrella; Metal Gear es una serie que generalmente han sido un éxito en ventas y crítica, en mi opinión no hay ningún juego malo en la saga, así de cuidado y planeado tiene su futuro Kojima y su gallina de los huevos de oro.
Comencé mi gusto por las aventuras del universo Metal Gear a partir del tercer capítulo de la saga, posteriormente jugué las primeras dos entregas y me sorprendió lo mucho que evolucionó la franquicia en sólo unos años, las mecánicas de control y jugabilidad han ido cambiando según las limitaciones de las consolas, y lo que más me gusta es que, para mí, la intrincada trama crece más y más sin tornarse aburrida, además de siempre ofrecer una jugabilidad y reto a prueba de balas; sin duda Kojima es un genio en este apartado y Metal Gear Solid V: Ground Zeroes es muestra de ello.
El prólogo, un par de horas muy interesantes
La campaña de Metal Gear Solid V: Ground Zeroes arranca justo después de los acontecimientos de Metal Gear Solid: Peace Walker (título de PSP), en los años 70. El objetivo de Big Boss/Snake es infiltrase en una base militar estadounidense ubicada en Cuba y rescatar a dos rehenes, Chico y Paz, quienes fueron secuestrados por una extraña organización militar llamada XOF, controlada por Skull Face; los soldados pertenecientes a la organización de Snake son torturados y existe el peligro de que revelen información importante si no se les da rescate pronto.
Tolo lo anterior puede sonar como una gran historia llena de giros e intriga como a las que nos tiene acostumbrados Kojima, lamentablemente esto no sucede, y menos si se trata de un prólogo. Por otro lado, es comprensible dado que la trama no es el punto fuerte del título: el gameplay es el principal atractivo y no defrauda.
No se preocupen, las cintas de audio y los archivos en texto que encontremos serán suficientes para llenar ese hueco en la inexistente trama, no sólo para darnos contexto de lo que está pasando o ya pasó, sino que a través de estos se habla de planes futuros y algunas que otras revelaciones que quedaron como cabos sueltos en Peace Walker. Por otro lado, es bastante difícil en un principio encontrar todas los secretos en la primera vuelta, obligándonos a terminar la campaña varias veces y de distintas formas para poder explorar todo el mapa.
Pasé cuatro veces Metal Gear Solid V: Ground Zeroes con un total de nueve horas invertidas y no he logrado sacar el 100 por ciento en las estadísticas, así que no se enfurezcan, se trata de un título exclusivamente planeado para pasarlo una y otra vez sin caer en lo aburrido, apartado que me sorprendió porque, hasta cierto punto, se hace muy adictivo si eres fan, te quedas con ganas de armar el rompecabezas de información recaudada y te propones a no detenerte hasta tenerlo todo.
Concluyendo con la historia, si bien es un juego principalmente recomendado para verdaderos seguidores de la franquicia, los primerizos no tiene por qué asustarse ya que en el menú principal del título se muestra una opción llamada “antecedentes” en la cual se relatan los principales hechos que dieron consecuencia a nuestra misión actual, es muy recomendable que los veteranos también le den una lectura a dichos archivos por si en algún punto del análisis de la información obtenida se nos pasa un detalle, a mi me pasó en un par de ocasiones.
La jugabilidad, el apartado más refinado de la saga
Pensemos por un momento lo que sería de nuestro espía favorito si sus movimientos no fueran tan precisos, no sería el icono que es en la industria. En consecuencia, Metal Gear Solid V: Ground Zeroes sigue con los grandes estándares de calidad que sus antecesores han impuesto, el movimiento del personaje se siente muy real y los comandos responden de manera inmediata en situaciones de tensión, otra cosa es que no lo sepamos aprovechar al máximo.
Comencemos por el sigilo, el apartado más importante del título. Los movimientos y acciones para pasar desapercibido ante los guardias están hechos a la medida de los escenarios, es decir, tanto las coberturas de asfalto, hasta las cajas y demás objetos que nos hacen invisibles son del tamaño exacto de Snake cuando se encuentra agachado. Como ya es de conocimiento, Snake puede acostarse y arrastrarse a cualquier posición en el mapa, lo cual hace excelente el uso de los arbustos para pasar encubiertos y nos ofrece cierta variedad a nuestro repertorio.
La mejor forma de lograr nuestro objetivo es evitando a los enemigos, lo cual representa un reto bastante decente; podemos matarlos a casi todos de manera sigilosa o con tiros a la cabeza con nuestra arma secundaria que se encuentra equipada con silenciador, sin embargo recalco que la mejor experiencia es precisamente evitar liquidar un sólo soldado.
En conclusión, podría escribir miles de detalles más sobre el apartado del gameplay, pero no lo hago porque es algo que los usuarios deben descubrir por ellos mismos, ya que siempre se aprende un nuevo truco en la pequeña aventura de Snake y el sigilo es nuestro mejor amigo en un amplio repertorio de opciones para afrontar la situación y rescatar a Chico y Paz.
Mundo abierto, la principal novedad
En 2005, Metal Gear Solid 3: Snake Eater ya planteaba la idea de un mundo abierto para las misiones del personaje, sin embargo las limitaciones de las consolas no le permitieron a Hideo Kojima hacer lo que en un principio tenía en mente. Ahora, gracias a las tecnologías de las nuevas consolas, el desarrollador japonés pudo hacer su sueño realidad y Ground Zeroes es el mejor ejemplo de lo que podemos esperar en el “juego completo”.
Como ya hemos visto en videos de The Phantom Pain, la inteligencia artificial es buena, sin llegar a ser lo mejor, cumple con hacernos la vida imposible y los enemigos tienen la posibilidad de ser interrogados, dejarlos inconscientes o asesinados con nuestro cuchillo; ya en el piso, los soldados pueden ser vistos por otros y activar las alarmas por lo que esconderlos será una prioridad, en un mundo abierto todos estos elementos funcionan al parecer de mejor manera y nos aseguran que podamos rejugar las misiones sin que por fuerza sigamos el mismo camino o mecánica.
¿Cómo se ve?
Metal Gear Solid V: Ground Zeroes es un videojuego trans-generacional, es decir, salió en consolas de pasada generación y en nuevas consolas, por ende los gráficos del juego se vieron un poco afectados, si bien en PlayStation 4 funciona a 1080p y 60 cuadros por segundo, la versión de Steam cuenta con múltiples opciones de resoulcion y algunas otras que mejoran el apartado gráfico, sin hacerlo inmaculado.
Una probadita de lo que nos espera
Es complicado para mi dar un veredicto sobre Metal Gear Solid V: Ground Zeroes tratándose de algo tan corto, es como si sólo evaluara una misión de todo un paquete que no ha llegado. No obstante, no significa que sea un mal juego, es toda la esencia, evolución y crecimiento de la saga resumidos en una especie de demo, la cual nos sorprende perfectamente cuando descubrimos que se trata de una misión de las muchas que habrá a futuro. Si yo pasé cuatro veces el juego de distintas maneras para un total de nueve horas invertidas en esta misión en Cuba, ahora imaginemos completar al 100 por ciento Metal Gear Solid V: The Phantom Pain. Lo sé, se sentirá abrumador.