¿Qué es lo que más se extrañaba de un Final Fantasy desde que la saga dejó la original PlayStation con tres de sus mejores exponentes en la primera consola de Sony? Si bien el combate ha evolucionado hasta parecerse muy poco al de las primeras entregas y el diseño de personajes aboga por cabello súper realista y rostros andróginamente afilados, lo que más añoramos de los primeros títulos de la franquicia es el mapa general del mundo. ¿Y qué creen? Final Fantasy Type-0 HD tiene su mundito para explorar a la vieja usanza y sólo por eso vale la pena conocerlo.
Final Fantasy Type-0 HD
Originalmente lanzado como uno de los últimos juegos para PSP a finales de 2011 y visionado como parte del universo Fabulla Nova Crystallis –que comparte elementos con Final Fantasy XIII y Final Fantasy XV-, nunca pudimos probar en Occidente esta joya de RPG que recibió halagos y buenos críticas de parte de la prensa y los usuarios japoneses. ¿Qué aclamaban? La oscura pero bien engrasada historia, así como un adictivo y vívido sistema de batalla que se parecía a todo, menos a Final Fantasy.
Quizá por eso mismo fue que en aquel momento Square Enix no se convenció de lanzar Final Fantasy Type-0 en América, al considerarlo una apuesta demasiada arriesgada porque se salía del molde y el rumbo que había tomado la franquicia durante los últimos años.
Sin embargo, helo aquí. Ya sea más que nada como herramienta mercadológica para vender la demo de Final Fantasy XV o para treparse al tren de las remasterizaciones, hay que recalcar al menos este caso se trata de un título que nuestro mercado nunca tuvo la oportunidad de jugar de manera oficial de otra forma que no fuera importándolo o con una cuenta PSN japonesa. Y aunque esperamos más tiempo de lo necesario y ya se nota el paso del tiempo, es una buena inversión.
Clase Zero
La historia de Final Fantasy Type-0 HD se centra en un grupo de cadetes llamado Clase Zero, jóvenes con increíbles poderes capaces cambiar el balance bélico en el conflictivo mundo de Orience. Cuando la armamentista nación de Milites, comandada por Cid Aulstyne, invade la región de Rubrum, todo parece venirse abajo. El cristal que protegía a los ciudadanos y fortalecía la magia de los cuerpos armados del país se vuelve inútil cuando Milites logra colocar un irruptor que evita que puedan usar cualquier ataque mágico contra ellos.
Al borde de la derrota y todavía con un poderoso L’Cie haciendo añicos a lo mejor de su tropas, la caída de Rubrum parecía inminente, hasta que los cadetes de la Clase Zero regresan a su hogar para defenderlo. Los chicos no sólo derrotan a las tropas de Milites, sino que son capaces de realizar magia y vencer al L’Cie pese al irruptor colocado.
Estos primeros minutos se nos narran con una emotiva secuencia cinemática al puro estilo de Square Enix. El tono oscuro, bélico y de perenne drama de Final Fantasy Type-0 HD inmediatamente nos invade y es cuando el juego nos suelta para controlar los primeros pasos de Ace y el resto de cadetes de la Clase Zero, mientras escuchamos las últimas y desgarradoras palabras de Izana, un joven soldado de Rubrum que fallece atado por las limitaciones del irruptor y el pánico en la cara al sentir acercarse la muerte para él y su fiel chocobo.
Tras esta misión –que sirve a manera de tutorial de Final Fantasy Type-0 HD-, nos enteramos que Machina y Rem, dos personajes a quienes rescatamos al principio, se unen a la Clase Zero.
La sorpresa es mayúscula pues este grupo se trata de una élite especial que se encuentra por encima de cualquier ejército y en gran medida con su propia agenda. La misma líder de los cadetes, Arecia Al-Rashia, hace evidente su desconfianza para con los nuevos integrantes.
No tardamos mucho en tener el primer giro de tuerca. Machina Kunagiri es hermano de Izana, el joven al que vemos morir en el primer episodio, y su sorpresivo ingreso a la Clase Zero responde a los intereses del gobierno de Rubrum por mantener un espía entre ellos.
Más interesante aún, la muerte de Izana parece estar más relacionada con la misma Clase Zero como culpable, que con el ejército invasor. Los engranajes empiezan a girar y ajustarse, mientras una serie de revelaciones y conspiraciones desfilan.
Algo que me gustó de Orience es esa intencionalidad de Square Enix de hacerte sentir que realmente vives en un mundo propio, con su cultura, su civilización, sus leyendas y todas clases de detalles que ayudan a la inmersión. Me encantó el manejo de la muerte y el olvido, y como en este lugar los recuerdos de los muertos son borrados para que no interfieran con la vida de quienes se quedan detrás de ellos.
Ciertamente Final Fantasy Type-0 HD recurre nuevamente a la sobre explotación de conceptos autóctonos haciéndolos pasar por cosas cotidianas; palabras como L’Cie, Peristylium, Tempus Finis y Agito se atraviesan incansablemente como si habláramos de tacos, tamales y carnitas, y en un principio cuesta trabajo darle seguimiento a todo esto sin sentir la historia convulsionada.
De hecho, pasan al menos cinco capítulos hasta más o menos empezar a entender de lleno los motivos reales de los personajes (protagonistas y antagonistas), y si a esto le sumamos la posibilidad de perderte algunos “escenarios” o de que estos cambien dependiendo el personaje activo que traigas (de entre los catorce para escoger), así como la posibilidad de New Game +, es obvio que la trama deFinal Fantasy Type-0 HD está hecha para prestarle mucha, mucha atención y rejugar el título varias veces para comprenderla en su totalidad. Terminarlo varias veces, vaya, o habrá más dudas que respuestas.
Un tip al respecto -que seguramente los fans de los JRPG no necesitarán- es hablar con cada personaje no controlable (NPC) que se encuentren. A pesar de la intrincada trama, la narrativa es sólida y alimentada en gran medida por todo lo que los habitantes de Orience tienen que decir. Sus diálogos están muy bien escritos y además de ayudar a facilitar la comprensión de la trama, te hacen reflexionar sobre los horrores de las guerras, la importancia de recordar a quienes se nos adelantaron en la muerte y los lazos con aquellos a quienes se ama.
Action RPG y combate táctico
Pasando al sistema de combate, Final Fantasy Type-0 HD se aleja de la fórmula de turnos (o turnos disfrazados) para ofrecernos un action RPG puro. Podemos movernos por el escenario, rodear a los enemigos, encontrar un punto débil o bien tomar distancia, más o menos similar a Final Fantasy VII: Crisis Core y la saga Kingdom Hearts, aunque no tan dinámico como en el crossover con Disney y con una cámara más confusa.
Flanquear y estudiar los patrones de los rivales de hecho es vital, sobre todo para hacerle frente a oponentes de mayor nivel, pues nos da oportunidad de realizar un Kill Sight, movimiento que mata instantáneamente a quien sea y que se genera como una oportunidad esporádica durante el combate, ilustrador por un cursor rojo.
Los jefes y enemigos más poderosos también cuentan con puntos débiles para bajarles bastante sangre de un golpe y que podemos identificar cuando el cursor se ve de color amarillo. Ten en cuenta además que usar los ítems conlleva un riesgo, pues al entrar el menú no se pausa la acción.
Pero a pesar de ser más orientado a la acción, el combate no pierde para nada el componente táctico. Al contar con catorce personajes para escoger tenemos varios tipos de especialistas: algunos son buenos en la larga distancia (como Ace y Cater), otros se sienten mejor actuando de cerca (como Machina, Queen y Cinque), los especialistas en magia y soporte (como Rem y Deuce) y varias posibilidades más. No olvidemos aparte los Eidolons/Summons, invocaciones que causan gran daño a los enemigos a costa de sacrificar al cadete en esa misión… y para tenerlos todos necesitarás al menos un par de vueltas por Final Fantasy Type-0 HD.
Al iniciar cada misión tendremos que elegir a los tres personajes activos (y podemos rotar entre ellos en batalla), junto a los de reserva, que entrarán cuando hayan eliminado a alguno de tus miembros; por su parte, los cadetes muertos no pueden ser “revividos” sino hasta terminar la misión. En la práctica esto funciona muy bien, pues aparte de añadirle dificultad le da cierto dramatismo al conflicto, las víctimas del mismo y las consecuencias de ir perdiendo tus hombres en el campo.
Esto no quiere decir que no hacer una buena selección te atore en una misión. Puedes terminar Final Fantasy Type-0 HD con cualquier combinación de cadetes, pero seleccionar a los más adecuados para ciertas situaciones, o con los que te acomodes más, puede facilitar el trámite. Yo, por ejemplo, nunca me hallé con King y no lo usaba ni por error.
Las peleas no sólo son dentro de las misiones. Como comentaba al inicio, el mapa del mundo regresa con todo y los encuentros random. Además, hay un segundo tipo de batalla, a manera del juego de mesa Risk, donde tienes que guiar pequeñas filas de soldados y tomar posiciones enemigas en el mapa. Este elemento me pareció totalmente prescindible, mucho tutorial para realmente pocas posibilidades. Dentro de las cosas que removieron de la versión original de PSP, me parecía más adecuado conservar el componente multijugador y mejor dejar fuera la lucha de escuadrones.
Pese a la ausencia del multiplayer, todas las magias y ataques especiales que sólo podían ejecutarse de esta forma fueron trasladadas a la campaña tradicional de un jugador. Otra de las adaptaciones de Final Fantasy Type-0 HD es la Arena, un espacio donde en PSP podías dejar en reposo la consola mientras tus personajes entrenaban y subían algunos niveles por sí solos. En las actuales consolas es algo similar, cargas el archivo de guardado en la Arena y al retomar al día siguiente el juego notarás que subieron de nivel tus monitos.
Aunque esto se presta a explotar el sistema, pues en lugar de esperar a que pase un día (o más), mueves el reloj/calendario de la consola y cargas el archivo de Final Fantasy Type-0 HD. Así rápidamente puedes subir decenas de niveles a varios personajes en cuestión de minutos.
Remasterización del pasado
En lo que obviamente sí se nota un brinco respecto a la versión portátil es en el apartado técnico, específicamente de la presentación visual. Los modelos de baja resolución de los protagonistas, monstruos y personajes en general fueron cambiados por aquellos de las secuencias cinematográficas (o rehechos en algunos casos), y lucen muy bien.
Ciertamente no todos los modelos y texturas fueron mejorados, y de repente en una escena notarás que alguno de los personajes tiene cara de “a mí no me remasterizaron”. Mismo caso de los escenarios, ya que salvo un par de lugares, el resto tiene texturas planas que solamente fueron reescaladas para que no lucieran tan pixeladas en Xbox One y PlayStation 4. Esto sin contar el diseño seccional del los niveles: avanzas por pequeños pasillos y cuartos con pantallas de carga a cada momento,clásico en aquella época, pero que denota que éste título ya es de un par de generaciones atrás. Hasta el mapa carga así.
La música está a la altura que ya todos conocemos de la franquicia, o sea excelente y pegajosa, y Final Fantasy Type-0 HD viene además con la opción de doblaje en japonés e inglés. Hay algunos problemas de sincronización con los labios y le falta punch a algunos actores de doblaje en cualquiera de los dos idiomas. Curiosamente, en lo personal me parece que se escuchan (y “sienten”) mejor en inglés.
Pese a todo, Orience nos agrada
No se puede negar que hay ciertos detalles que faltaron pulirse en la remasterización, pero el adictivo sistema de combate, la sublime historia y la necesidad de terminar varias veces el juego logran sobrepasar cualquier problema. Final Fantasy Type-0 HD es como uno de esos enemigos que enfrentas hacia el final, una quimera de tres cabezas: primero, con muchísima nostalgia y el “feeling” de un Final Fantasy de antaño; por otro lado, con un sistema de batalla vertical y suficientes innovaciones que lo convierten en una entrega muy original, y como cereza del pastel la impresionante demo de Final Fantasy XV.