Siempre da gusto cuando compañías aparentemente ajenas a la industria de los videojuegos se acercan a los mismos para establecer nuevos lazos con un sector de público que cada vez crece más, al menos en México. Este fue el caso de Red Bull, que realizó el pasado fin de semana un interesante certamen competitivo de videojuegos llamado Red Bull Metagames.
Como una especie de “Iron Man of Gaming”, esta evento reunió en la Ciudad de México a 268 competidores -hombres y mujeres-, quienes demostraron su habilidad en siete estaciones de juegos distintas donde el objetivo era sumar el mayor puntaje posible. Las estaciones incluían desde clásicos juegos de peleas como Street Fighter II hasta la acción FPS de la saga Halo, y uno podía seleccionar en cuál jugar para sumar más unidades.
Al final del día, Héctor Jiménez se alzó como ganador de la primera edición de los Red Bull Metgames, con un puntaje de 161 y haciéndose acreedor a una Xbox One y dos juegos para dicha consola; en segundo lugar se ubicó César Ruiz, con 128 puntos, mientras que en la tercera plaza se colocó Mauricio García, quien obtuvo 94 unidades.
El campeón, Héctor Jiménez, compartió su táctica y comentó: “Nunca imaginé que fuera a ganar porque fui invitado de último minuto. Mi estrategia fue quedarme todo el tiempo en la Estación de Zen Street Fighter, porque empecé a darme cuenta que ahí estaba ganando demasiados puntos”.
Densho, conocido veterano de este medio y encargado de la logística de los Red Bull Metagames se mostró contento por la respuesta y en cierta manera agradecido con la apertura de este tipo de espacios competitivos. “Sólo existían dos tipos de eventos de videojuegos: las competencias profesionales, que requieren que los participantes tengan mucha experiencia y dedicarle como si fuera una carrera, y las otras reuniones que son las que subestiman el interés de los jugadores y plantean un ambiente más soso. Red Bull Metagames es el punto medio entre los jugadores profesionales y los que no lo son”, puntualizó Densho.