El original Skylanders rascó una comezón para varios usuarios que simplemente tenían que coleccionar todos y cada uno de los juguetes/contenido adicional (ya disponible en el disco), después hubo gigantes que desbloqueaban nuevos retos y más juguetes para coleccionar, ahora Skylanders: Swap Force trae una nueva forma de interactuar: Finalmente puedes saltar en un juego de plataformas.
Skylanders: Swap Force
La historia de Skylanders: Swap Force comienza con algunas animaciones presentando a tu antiguo rival, Kaos, la amenaza del día que involucra un plan increíblemente complicado que garantiza varias horas de juego. Kaos vuelve a las islas y aprendes de un evento que ocurre cada 100 años que dio origen a la fuerza Swap Force y la habilidad particular de estos Skylanders de poder intercambiar piezas. A manera de nota personal, en inglés el actor de voz que da vida a Kaos es Richard Steven Horowitz, quien dio vida a Invasor Zim en el clásico cartoon, en lo personal todo un gusto escuchar las escenas donde aparece.
Para quienes no conocen el concepto, en Skylanders: Swap Force se trata de jugar en tu pantalla con los juguetes que realmente tienes de forma física. Diversos dispositivos de realidad aumentada permiten esto, por lo que básicamente estás limitado a jugar en tu consola con aquellos personajes que poseas su contraparte real en figura.
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La trama es simple de entender con una meta clara: “Detén al malo de hacer cosas malas”, perfecto para la audiencia objetivo, además del dialogo y narrativa que dan ánimos al héroe para seguir en la aventura y ayudar a los aldeanos de las múltiples islas que visitarás en todas sus versiones: Xbox 360, Xbox One, PlayStation 3, PlayStation 4, Wii y Wii U.
Como adulto a veces es difícil disfrutar un título enfocado para audiencias más jóvenes, pero en Skylanders: Swap Force hubo pequeños momentos que disfruté, como cuando conoces a un pez autoconsciente que dice algo como: “Yo no soy como mi tío, él no sabía cuándo callarse, el seguía hablando bla bla bla cuando todos querían que se callara y yo no soy así, yo sé cuándo terminar de decir algo, cuando termino de decir lo que voy a decir es porque terminé lo que iba a decir, sí señor, sé cuándo mantenerme callado, no necesito seguir hablando”.
La parte jugable en Skylanders: Swap Force consiste en combates donde debes adquirir dinero para comprar mejoras para tu personaje en turno y encontrar sombreros que agregan puntos a tus estadísticas generales, también deberás hallar un medallón en alguna parte del nivel para obtener todas las habilidades posibles en tu criatura. Los controles son generalmente sencillos.
Los nuevos Swap Force son separables en parte inferior y superior para que pruebes juntar las partes de diversas figuras, permitiendo combinaciones interesantes y las mejoras pueden ser específicas a la parte superior o la inferior, así que puedes tener un personaje más a tu gusto y estilo de juego. Personalmente escogí una combinación con una parte inferior rápida que pudiera esquivar fácilmente y una parte superior de ataque fuerte.
Los escenarios incluyen retos variados, nunca estás simplemente eliminando olas de enemigos una tras otra, también saltarás en tambores para restaurar la música en lo que podría describir un café para gatos musicales, pelearás contra un cangrejo alemán, navegarás con un pez en un pantano/templo, todo para restaurar la paz y la tranquilidad.
Ningún juego es perfecto
Mi primer problema con cualquier juego de esta franquicia es tener que buscar (y comprar) cada uno de los Skylanders que sea del elemento necesario para abrir la puerta y cambiarlo a mitad del juego; en Spyro’s Adventure requerías uno de cada elemento, ocho en total para tener acceso a todo el contenido del juego. Ahora necesitas al menos un Gigante, para abrir cofres que encuentras en todos los niveles; seis de los nuevos Swap Skylanders, por las nuevas habilidades que tienen para moverse como escalar, teletransportación, etc, y dos más para tener los elementales necesarios y abrir las nuevas puertas que requieren una combinación de elementos. Suponiendo que este es tu primer Skylanders, eso es un mínimo de nueve diferentes juguetes que tener y que tienes que adquirir por separado en muchos casos.
Aunado a la parte de gastar-gastar de Skylanders: Swap Force, ya en gameplay algunos de los monitos son demasiado lentos y difíciles de manejar, no sabía si iba a lograr un salto y terminaba calculando mal la distancia. La cámara fija es molesta cuando tratas de encontrar tesoros escondidos o caminos para explorar los niveles. En algún momento abrí una puerta que requería una figura del elemento vida, utilicé a Stump Smash, y la cámara se fijó en un ángulo incómodo y cada que fallaba, la interfaz de usuario bloqueaba mi punto de inicio.
Conclusión
Skylanders: Swap Force es más de lo mismo, que no es malo, pero sí un claro intento de obtener más dinero; si tienes uno de los portales anteriores, no servirá para este nuevo juego, debes comprar nuevo portal con nuevos personajes para obtener una experiencia completa. Lo más probable es que lo adquieras para un niño de menos de diez años y en ese caso querrá tener la mayor cantidad de personajes posibles. Es difícil ver este “mezcla y crea” como una innovación en la fórmula, pero a pesar de sus fallas hay mucho, mucho contenido incluso si sólo tienes los juguetes que vienen con este paquete.