Phil Tossell, un antiguo programador de Rare que trabajó en títulos como Donkey Kong Country y Star Fox Adventure, comentó aspectos negativos acerca de sus experiencia laboral con Microsoft, cuando ésta adquirió la compañía en septiembre de 2002.
Tossell compartió en una entrevista que al realizarse dicha transferencia la compañía estaba determinada a crear juegos que cumplieran con las expectativas de la nueva compañía, sin embargo Microsoft les pidió que hicieran juegos que siempre habían hecho.
“Nos pidieron que hiciéramos juegos que siempre habíamos hecho para una audiencia que no quería ese tipo de juegos. Títulos como Black Widow, Crackdown y un Kameo más maduro fueron nuestro intento para brincar esa barrera, pero Microsoft no lo permitió”.
Tossell afirmó a la revista Retro Gamer que Microsoft insistió en que Rare desarrollara juegos para Kinect, lo cual sacrificó el potencial creativo del estudio. Actualmente, Rare está trabajando con la serie Kinect Sports y asesorando el desarrollo del nuevo Killer Instinct para Xbox One.