Hoy en día, con estupendos lanzamientos, las películas de superhéroes por fin se están consolidando como un género válido. Sin embargo, tanto en el pasado como en el presente se han cometido errores, se siguen cometiendo y se cometerán.
Tratándose de adaptaciones de materiales ya existentes, existen siempre diversas formas de intepretar a un personaje. Aunque estamos de acuerdo, y la historia así lo demuestra, en que varias interpretaciones pueden ser válidas, fieles y memorables (el caso más claro son las versiones del Joker, ambas magistrales, interpretadas por Jack Nicholson y Heath Ledger, que en paz descanse), hay cosas que sencillamente están mal.
Sea por un error de casting, motivos del guion o simplemente un horrible malentendido en cuanto al personaje representa, se han cometido crasos errores en cuanto a interpretaciones, que no sólo llegan a molestar a los fans de la obra original, sino que incluso pueden ser un fracaso a los ojos de cualquier espectador casual que vea la película.
A continuación te llevamos por un recorrido a través de la historia de las adaptaciones del cómic a la pantalla grande, y te presentamos nuestro Top 13 de las peores interpretaciones de personajes de cómic en el cine.
13. Hal Jordan (Ryan Reynolds) – Linterna Verde (Martin Campbell, 2011)
En los cómics, Hal Jordan es un temerario, mujeriego e irresponsable piloto de aviones, que tras entrar en contacto con un extraterrestre hereda el Anillo de Linterna Verde y es investido con increíbles poderes para defender la Tierra.
En la película… También.
¿Dónde estuvo el error? Tanto en la escritura como en el casting. Más que un cínico, aquí Hal parece desesperado por hacerse el simpático, y parece demasiado preocupado por la chica que le interesa (el Hal de los cómics difícilmente se rebajaría a rogar). Esto parece tener mucho que ver con el casting de Ryan Reynolds como Green Lantern; aunque el actor tiene cierto parecido con el personaje como lo dibujan, sin ofender, tiene también una cara de menso que no puede con ella. Probablemente debido a eso, no se le podrían creer las bravuconadas que el personaje llega a hacer en los cómics sin dejar de caer bien. También, durante su secuencia de entrenamiento, la actuación de Reynolds lo hace ver bastante llorón. Aunque con el antifaz puesto la impresión de Linterna Verde mejora un poco, sin ella Reynolds nomás no nos convence de que él es Hal Jordan.
12. Psylocke (Meiling Melançon) – X-Men 3: La Batalla Final (Brett Ratner, 2006)
En los cómics de X-Men, Psylocke (Elizabeth Braddock) es una mutante británica con poderes psiónicos, entre los que se cuentan la telepatía, telekinesis, psicoportación y la capacidad de crear espadas de energía y proyectiles en forma de mariposa. Creada por Jim Lee, esta chica se convirtió en una de las heroínas más salvajemente populares del título durante la década de los 90.
Sin embargo, en X-Men 3: La Batalla Final Psylocke es un personaje muy menor. Interpretada por la americana de ascendencia sino-japonesa Meiling Melançon, forma parte de los mutantes disidentes durante la rebelión de Magneto, y es completamente malvada. Esta versión de Psylocke aparece durante menos de un minuto en la película, el único poder que le vemos es la de hacerse invisible o teleportarse (ni siquiera queda claro), no cuenta con una sola línea, y es destruida por Phoenix al poco tiempo de su aparición.
Aunque la actriz no quedaba mal para interpretar personaje (en los cómics, Psylocke tiene rasgos asiáticos debido a que El Mandarín alteró su fenotipo con experimentos genéticos), su papel está tan completamente alterado que no vale la pena en lo absoluto. De hecho, si no leemos en los créditos que el personaje es Psylocke, ni nos enteramos que es realmente ella… ¿Había alguna necesidad de decir que lo era?
11. Emma Frost (January Jones) – X-Men: Primera Generación (Matthew Vaughn, 2011)
Emma Frost es una mutante con aptitudes telepáticas originaria de los cómics de X-Men. A través de su larga (e interesante) historia en los cómics, comienza como la Reina Blanca de la organización maligna Hellfire Club, para después cambiar de bando y unirse a los Hombres X como instructora en una de las escuelas de Xavier. Recientemente, se le ha visto vinculada sentimentalmente con Cíclope.
En la película, los orígenes no difieren mucho: Emma trabaja para Sebastian Shaw y su hermandad del Hellfire Club. Ella es la encargada de la “diplomacia”, la cual resuelve con ayuda de sus poderes mentales.
¿Cuál fue el problema aquí? El casting. Se dice que originalmente, Alice Eve sería quien encarnaría a la Reina Blanca, pero al final el trato se concretó con January Jones. La señorita Jones, aunque razonablemente parecida a Emma Frost, luce demasiado vieja (y no muy agraciada) para el papel de quien se supone una de las más bellas y exhuberantes personajes del universo Marvel. Aunque la interpretación de Jones estuvo bien en cuanto a su lado malvado y manipulador, le faltó el toque sexy que Emma nunca pierde en el cómic.
Y como nota al pie, un personaje similar a Emma Frost apareció en la película de Wolverine de 2009, situada como cuarenta años después, pero con un aspecto notoriamente más joven. Eso sólo ayudó a confundir más las cosas.
10. Blackheart (Wes Bentley) – Ghost Rider (Mark Steven Johnson, 2007)
En los cómics, Blackheart es uno de los demonios antagonistas del motorista fantasma Ghost Rider. Creado por el señor de los demonios, Mephisto, a partir de las huellas emocionales dejadas por cientos de asesinatos, este monstruo es autor de innumerables crímenes y blasfemias. Su nivel y variedad de poderes incluye ataques de energía, comandar a legiones de demonios y telepatía lo bastante poderosa para matar a un planeta entero.
En la película, Blackheart es hijo de Mephisto y mantiene una relación difícil con su padre. Los únicos poderes que le vemos en la cinta son tocar a la gente hasta matarla y ser resistente a los objetos benditos, así como a los ataques de Ghost Rider. Después de absorber un montón de almas torturadas, pierde totalmente dichas resistencias y Ghost Rider lo despacha con suma facilidad. Fin de la historia.
Pero otro de los cambios que más se resintió fue el diseño de Blackheart en la película. Originalmente una figura enorme y oscura, con una cabellera de espinas y el cuerpo draconil de un auténtico demonio, aquí es nada más un tipo pálido con ropa negra y aspecto serio. Aunque esto no es mala idea en un principio (la hiper estilización de los personajes que hemos visto en películas como Inframundo es una buena forma de actualizar a un personaje), Blackheart jamás muestra su “verdadera forma”, ni siquiera luego de haber absorbido el montón de almas… Así que desaprovechan totalmente el diseño genial y atemorizante del cómic. Además, y que tal vez sea lo más importante, como villano en la película es monumentalmente aburrido. ¿Lo peor? Que Marvel recientemente decidió rediseñar al personaje con el concepto de la película, convirtiéndolo ahora en el Kid Blackheart.
9. Superman (Brandon Routh) – Superman Regresa (Bryan Singer, 2010)
En los cómics, Superman es un alienígena venido de un planeta moribundo, que en la Tierra obtuvo grandes poderes que le sirven para luchar contra el crimen, siempre disfrazado como el periodista Clark Kent.
En esta vaga secuela a la serie de películas de 1978-1987, encontramos a Clark Kent regresando luego de una larga ausencia, durante la cual su padre adoptivo, Jonathan Kent, murió y es padre de un niño de cinco años. Su archinémesis Lex Luthor encuentra una forma de escapar de prisión y tiene un brillante plan malévolo para destruir el mundo con kryptonita y así poder cobrar precios altos de bienes raíces (no es broma).
Este es uno de los más severos casos de casting que hemos visto. Con su físico núbil y apariencia inocente e inofensiva, Brandon Routh no se parece mucho a la idea que la mayoría de la gente tiene de Superman (bueno, tal vez se parezca un poco a George Reeves, quien interpretó a Superman en los seriales de televisión de los 50), y aunque esto pudiera ser paliado por una buena actuación, la realizada por el señor Routh es absolutamente aburrida, incapaz de transmitir emoción alguna al espectador. Un Superman que carece de encanto no puede ser un Superman. Por si fuera poco, en el guion cuenta con momentos que le hacen ver como un guiñapo, siendo duramente pateado por Lex Luthor y sus compinches. Hasta el traje está pésimo.
8. Steel (Saquille O’Neal) – Steel (Kenneth Johnson, 1997)
Tras la muerte de Superman a manos de Doomsday, un sobreviviente del caos en Metrópolis emergió de un edificio derrumbado. Se trataba de John Henry Irons, quien más tarde se volvería el superhéroe Steel equipado con una armadura diseñada por él mismo. ¿Su motivación? Sacar de las calles a un grupo de mafiosos que usaba armas que él mismo había diseñado.
En la película, aunque quitando todo lo relacionado con Superman, sus motivaciones son más o menos las mismas, lo que, como pueden pensar, no da pie a una trama interesante. Casi podría asegurar que esta película sólo salió porque alguien en la Warner le halló parecido a Shaquile O’Neal con el personaje, y dado que el basquetbolista era la figura pública número uno del país decidieron filmar este bodrio y engañar a algunos despistados.
¿El resultado? Terrible, no sólo por el largometraje, que es muy malo, sino porque se nota que fue una producción con un presupuesto reducido y muy mal utilizado. Para ser un súper ingeniero, el traje de Steel es poco menos que patético y parece más bien construido para matar de risa a sus atacantes que para detenerlos por la fuerza. Las armas secretas del traje de Steel, que en el cómic son impresionantes, aquí no están presentes debido a falta de presupuesto. Hay incluso quien dice que la verdadera superheroína de la película es la sidekick Sparks, una chica en silla de ruedas paradójicamente mejor equipada que Steel en cuanto a armas, y que incluso salva a todos al final.
7. Pingüino (Danny de Vito) – Batman Regresa (Tim Burton, 1992)
Aunque por muchos Batman Regresa es considerada una de las mejores adaptaciones del Hombre Murciélago al celuloide, quizá esto se deba a que antes de las trilogía de Christopher Nolan no había de donde escoger. La adaptación del Pingüino en este filme es el mejor ejemplo.
En los cómics, Oswald Cobblepot es un aristócrata, un hombre con un histórico linaje en Gotham City amante y conservador de las aves (especialmente palomas) que prácticamente se convierte en criminal por la sensación de poder. Aunque efectivamente, antes de los años 90 era normal verlo usando paraguas con diferentes adaptaciones para atacar a Batman, esta característica se fue dejando de lado para la época en la que apareció Batman Returns. Serio y excelente estratega, se toma sus negocios con mucha seriedad y al contrario de casi toda la galería de villanos del encapotado, el Pingüino está totalmente cuerdo, usando siempre el ingenio y la clase por encima de todo.
En Batman Regresa, el Pingüino fue abandonado de bebé por sus padres ricos debido a su deformidad, viviendo en las cloacas de Ciudad Gótica por años… y criado por pingüinos. A su regreso a la luz, el villano planea lanzarse como alcalde disfrazando sus verdaderas intenciones de matar a todos los primogénitos de la ciudad.
No sólo su origen tarzanesco es ridículo, sino la interpretación de Danny DeVito está fuera de todo contexto, con un personaje demente que más parece una continuación del Joker de la primera cinta, que un nuevo villano: chistosín, con un ejército de payasos y malabaristas, una armada de pingüinos con misiles, y hasta un patomóvil.
El problema de la interpretación de don Tim Burton es que es demasiado una fantasía personal sobre un vago concepto del personaje, y por ende muy poco fiel: mientras el Pingüino en los cómics es totalmente consciente de sus deformidades y aprendió a adaptarse a las expectativas, el de Burton es totalmente lo contrario: Un desadaptado. Burton le metió con todo a su estética de freak show para entregar a un personaje absolutamente repulsivo, siendo ese el único nivel en que se quiso quedar.
Quien aún asegure que este Pingüino es una versión más oscura del personaje es porque vio la película cuando tenía siete años o nunca ha tocado un cómic de Batman.
6. Elektra (Jennifer Garner) – Daredevil (Mark Steven Johnson, 2003)
En los cómics de Daredevil, Elektra Natchios es una asesina del Clan de la Mano. De orígenes griegos, es una auténtica matona a sangre fría metida hasta las narices en las altas esferas de la corrupción.
En la película, interpretada por Jennifer Gardner, es la hija de un billonario que busca venganza por la muerte de su madre, aprendiendo artes marciales. Primero rival y luego interés amoroso de Daredevil por causa de una serie de malentendidos, Elektra encuentra la muerte a manos del matón experto Bullseye.
Los errores de la película no se limitaron a cambiar casi por completo la identidad del personaje. La selección de Jennifer Garner como la actriz que encarnara a esta antiheroína despojó a Elektra de su exótica belleza griega. Incluir la escena clave de su muerte a manos de Bullseye, tal como ocurre en los cómics, no arregló el problema. Para rematar, esta versión del personaje protagonizó su propia cinta en 2005, la cual fue extremadamente aburrida.
5. Dos Caras (Tommy Lee Jones) – Batman Eternamente (Joel Schumacher, 1995)
En las historietas de Batman, Dos Caras es la nueva identidad del fiscal de distrito Harvey Dent, nacida luego de que un mafioso le virtiera ácido en el rostro. En realidad, Dent había estado batallando toda su vida con una ambivalencia de pensamientos y este accidente fue únicamente el detonante para convertirse en un criminal extremista.
En Batman Eternamente, Harvey Dent enloquece debido a su accidente y se convierte en un criminal entregado al robo de bancos. Para tratar de derrotar a Batman (el principal obstáculo en sus planes) se alía con Riddler (Acertijo). Desde luego, ambos villanos son derrotados por Batman y Robin al final de la película.
¿Objeciones? Lo primero que debemos decir al respecto, es que esta película es muy mala. Se dice que luego de la oscura Batman Regresa, los ejecutivos de Warner Bros. querían regresar a un villano “chistoso” como el Joker, y su idea fue reemplazarlo con Jim Carrey y Dos Caras. Un personaje más que serio y amargado en los cómics, aquí el principal rol de Dos Caras es reírse de las bromas del Acertijo.
Aunque Tommy Lee Jones cumple a medias su rol de criminal formal, nunca se profundiza en su psicología y es nada más otro de los orates chistosines de Gotham City. Tal vez no sea necesario decirlo, pero la interpretación de Christopher Nolan actuada por Aaron Eckhardt en The Dark Knight estuvo muchísimo mejor.
4. Sue Storm (Jessica Alba) – Los 4 Fantásticos (Tim Story, 2005)
En los cómics de Stan Lee y Jack Kirby, la joven Sue Storm se convirtió en la Chica Invisible cuando fue impactada por una marea de rayos cósmicos durante un viaje de exploración espacial junto a sus amigos Reed Richards y Ben Grimm,y su hermano Johnny. Como miembro de los Cuatro Fantásticos, Sue obtuvo poderes de invisibilidad y creación de campos de fuerza. Formando equipo con Reed, llegó a casarse con él, cambiando su nombre a Mujer Invisible, volviéndose una de las fuerzas del equipo e incluso dando a luz a dos hijos prodigio.
En la película, la historia es muy similar, aunque no llegamos a verla convertirse en madre.
¿Cuál es el problema aquí? Tanto el casting como la escritura. En los cómics, Sue gradualmente se convierte en una figura fuerte, representando a la mujer y madre luchona americana. El casting de Jessica Alba (que físicamente en nada se parecía a la de los cómics) fue más el de una chica bonita, sin nada de la personalidad asertiva de la Sue original. También, a los escritores les dio por volverla más bien torpe y nerviosa, inmiscuyéndola en varias vergüenzas públicas por motivo de desnudos, perdiendo por completo el sentido del personaje. Y para rematar, la actuación de la señorita Alba… ¡Fue pésima!
Pa’ acabarla de amolar, de nueva cuenta a Marvel se le ocurrió que sería buena idea integrar cosas de este fail de película, y desde mediados la década pasada le han estado dando a las ilustraciones de Sue un parecido con Jessica Alba. Ya nada más esperamos al relanzamiento de la franquicia fílmica en 2015 para olvidarnos de esta triste interpretación.
3. Wade Wilson/Deadpool (Ryan Reynolds) – X Men Orígenes: Wolverine (Gavin Hood, 2009)
Uno de los personajes de cómic más populares de las últimos décadas, Deadpool fue un mercenario que hizo un trato con el programa canadiense Weapon Plus para servir de sujeto de experimento a cambio de una cura para su cáncer. El programa lo dejó permanentemente desfigurado y bastante loco (y demencialmente divertido), pero le dio agilidad y resistencia sobrehumanas, la capacidad de regenerarse… Y la de -extrañamente- darse cuenta de que es un personaje de cómic.
En los cómics, Wade Wilson es un agente del equipo de operaciones negras canadiense Team X y desde el inicio ya exhibe capacidades sobrehumanas. El experimento (que al parecer fue llevado en contra de su voluntad) dota a Wade de los poderes de otros mutantes, incluyendo teleportación, regeneración, rayos ópticos, y katanas de adamantio que surgen de sus brazos.
¿Qué es lo malo de esta adaptación? Deadpool está mal en todo aspecto: Aunque se trata de un Wade Wilson pre-transformación, al parecer incluyeron aspectos de su personalidad “loca”… Pero sus chistes simplemente no tienen nada de divertido y su actuación, más que graciosa y simpática, es desesperante y fastidiosa. La idea de convertirlo en un monstruo tipo Terminator fue espantosa, y el simplón diseño ha llevado a que algunos se refieran a él como “Baraka” en vez de Deadpool.
2. Bane (Michael Reid McKay / Robert Swenson) – Batman & Robin (Joel Schumacher, 1997)
En los cómics, Bane es un huérfano de ascendencia latina nacido en una prisión, donde aprendió todos los tejes y manejes del crimen. Habiéndose entrenado durante toda su vida física y mentalmente, y aumentando su fuerza a niveles súper humanos con ayuda de la droga llamada Venom. Bane es un oponente al nivel de Batman y en alguna ocasión fue capaz de vencer y retirar al murciélago.
En la película, Bane es un rehén de la prisión sudamericana de Pena Duro (no se lo comenten a un estudiante de secundaria). Sujeto del experimento de un científico loco, se le administró una droga que lo convirtió en una mole de músculos, pero al tiempo redujo su inteligencia a la de un simio. Liberado por la malévola Poison Ivy, se convirtió en su guardaespaldas.
El Bane de Batman & Robin no tiene mucho que ver con el del cómic, salvo el uso del Venom y que es un prisionero latino. Se dejó fuera todo su rica historia y trasfondo, y su nivel como un villano con gran inteligencia táctica. Aunque el casting no está taaan mal (un poco panzón, eso sí), y el disfraz y los efectos visuales son razonablemente fieles, en la película es reducido a un gorila sin cerebro. La verdad, se le metió más como matón de relleno que otra cosa, y en las películas de Schumacher no puede pedirse mucha fidelidad. Pero eso no lo salva de ser una pésima adaptación; el Bane de Batman: La Serie Animada, que debutó tres años atrás, fue una adaptación por mucho superior de este personaje.
1. Johnny Blaze (Nicolas Cage) – Ghost Rider (Mark Steven Johnson, 2007)
En los cómics, Johnny Blaze es un motociclista de exhibiciones que hace un trato con el demonio Mephisto para salvar la vida de su padre adoptivo a cambio de su alma. Sin embargo, el diablo le jugó chueco y no sólo mató a su padre, sino que lo condenó a convertirse en un esqueleto con poderes demoniacos y servirle en algunos encargos. No obstante, Johnny tiene algunos poderes sobre su transformación y la usa para ayudar a los inocentes, en un intento por redimirse.
En la película, pues casi igual, salvo que el trato lo hace para salvar a su padre real, y no adoptivo.
¿Qué podemos decir sobre esto? Nicolas Cage es un gran fan de Ghost Rider y se ofreció a protagonizar esta historia, pero se trata de uno de los errores de casting más terribles que hayamos visto. Apenas se le puede creer a este cincuentón su papel de un retador del peligro, con su personalidad errática y poco clara. En el papel del superhéroe, las excéntricas decisiones de interpretación tomadas por Cage son desconcertantes, y más que intriga lo que causan es risa o pena ajena. Otros momentos están extremadamente sobre actuados al punto de la caricatura, y es imposible de creer un solo momento de la película.
Este filme se encuentra en el fondo del barril de las películas de superhéroes, y la interpretación de Nicolas Cage como Johnny Blaze/Ghost Rider es total y definitivamente la peor que hemos visto en todo el género. Así y todo, tuvo una secuela, incluso más mala que la original.
2 comentarios
por mucho q me duela la pelicula de punisher, la de los 80 fue pesima, sabias q era punisher x el nombre del personaje y por el cartel de la pelicula
estoy de acuerdo con casi todos los personajes aqui citados, menos el pinguino, ese si rifo, pero faltaron grandes errores como arnold como mr freeze, uma como poison ivy,