Este fin de semana, ejecutivos de las más importantes desarrolladoras de videojuegos se reunieron con el vicepresidente de los Estados Unidos, Joe Biden para hablar de la violencia en dicho rubro.
Con representantes de grandes compañías como Activision, Blizzard, Zenimax Media, Electronic Arts, Take-Two Interactive y Epic Games, así como investigadores de las universidades de importantes universidades estadounidenses, se llevó a cabo una reunión acerca de la violencia en los videojuegos. Sorpresivamente, uno de los presentes en la reunión comentó que el vicepresidente Biden no se apresuró a juzgar a nadie sino que adoptó una posición neutral y buscando abordar el tema con la mayor seriedad posible.
Esta reunión llegó al final de una semana donde el gobierno de Estados Unidos sostuvo reuniones con la Asociación Nacional de Rifles y la Asociación de Películas de América, todo en un “esfuerzo para desarrollar propuestas políticas en respuesta a la tragedia en Newtown” señaló la Casa Blanca a través de un comunicado de prensa.
Por su parte, Joe Biden señaló que “no hay una razón específica a la violencia en los Estados Unidos, no quiero juzgar a nadie por el momento”. Al preguntarle si había un aumento en la cantidad de violencia en nuestra cultura debido en parte a la violencia explícita en industria del entretenimiento, el vicepresidente de los Estados Unidos contestó un tajante “no sé la respuesta a esa pregunta”.
También las compañías desarrolladoras que asistieron a la plática han ofrecido su ayuda para ahondar en el caso y poner de su parte para frenar una escalada de violencia que ha derivado en matanzas en diversos estados.
Hay que tomar en cuenta, que precisamente en el caso de la masacre de Newtown, un periódico inglés aseguraba que gran parte de los trastornos del asesino se debían a que jugaba mucho Dynasty Warriors.