Valiente (Brave) es el decimotercer filme animado de Pixar, que después de dos años consecutivos de secuelas (Toy Story 3 y Cars 2) ofrece en la pantalla grande una historia más en la vena de su distribuidora Disney que de los trabajos clásicos del estudio.
Valiente
Hay ocasiones en que la industria cinematográfica se llena de propuestas tan rebuscadas que queda poco espacio para películas con una historia simple y hasta conocida, pero que lleven la etiqueta de entretenimiento como bandera más allá de entregar un largometraje innovador o con un gran derroche de recursos narrativos.
Pixar lo entiende, y con Valiente revive los cuentos de hadas y princesas en el celuloide. Atrás deja a los muñecos, vehículos y animales que hablan para adentrarnos en la vida de una peculiar doncella que desafía las costumbres de su época y se embarca en una aventura medieval, que si bien no se siente particularmente fresca, nunca deja de ser atractiva.
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La princesa de Pixar
Valiente es la historia de Mérida, una princesa escocesa del siglo X que no pretende seguir con las tradiciones casamenteras que le imponen. La norma dicta que cuando la princesa cumple determinada edad, los primogénitos de los clanes vecinos serán presentados para competir por su amor y mantener la alianza que ha perdurado por años entre las distintas familias.
Los clanes son invitados por el rey Fergus y la reina Elinor para participar en una suerte de juegos de destreza y fuerza, para que quien resulte ganador quede comprometido con Mérida. Como es de suponerse, la joven no está de acuerdo con ésto y decide “defender su mano”, ya sea participando ella misma en las competencias e incluso recurriendo a un encantamiento para que su madre cambie y no la obligue a casarse.
Las cosas no salen como Mérida esperaba y sus abruptas decisiones ponen en peligro no sólo la vida de su familia, sino el balance existente en el reino, al poner en tela de juicio la paz entre los distintos clanes, que basan su fortaleza en la unión de todos para un fin común.
La historia parece un viejo conocido de los cuentos de hadas y a muchos les recordará por momentos a varias otras cintas del género, pero claro, Pixar le pone su toque a este relato que se siente muy Disney, aunque con dos diferencias en específico: contrario a las damiselas -que suelen estar en desgracia- de la casa de Mickey Mouse, Valiente nos presenta a una princesa autosuficiente.
En segunda, la película no da lugar como tal a villanos ni antagonistas, sólo personajes cuyo destino los ha llevado por un rumbo donde quizá el cúmulo de sus acciones no son precisamente las mejores.
Además de estos detalles, Valiente basa su fortaleza narrativa en sus protagonistas, personajes siempre vívidos, bromistas y divertidos, que de cierta manera encajan en el clásico patrón de los cuentos de hechizos y princesas, pero a los cuales Pixar otorga personalidades interesantes y ajenas a su papel en la película, roles que uno fácilmente puede asociar con los de una familia actual… lo que la vuelve no sólo animadamente verídica, sino muy entretenida.
Mérida
Una princesa de rojizo cabello ondulado, alejada del concepto de doncella que espera el rescate de su príncipe azul e incluso pudiera parecer un poco tomboy. La protagonista de Valiente sacó más el carácter de su padre que el de la reina, volviéndose impetuosa, imprudente y decidida, pero que debajo de esa coraza de adolescente rebelde esconde una niña frágil y con deseos simples.
Fergus
El rey es la fiesta en este largometraje animado. Un padre chévere dicharachero al cual le fascina contar una y otra vez las anécdotas de sus aventuras, sobre todo las que tienen que ver con temibles oso, con los cuales siente aversión desde un ataque que sufrió hace varios años. Su bigote despeinado y su enorme nariz complementan a uno de los personajes más entrañables que Pixar ha creado hasta la fecha.
Elinor
La típica mamá perfecta que desea retratar su vida en la de su hija porque considera que es lo correcto y el modelo a seguir. La reina escocesa lleva toda una vida enseñándole a Mérida cómo se debe comportar en cualquier situación una dama de alcurnia, pero parece que la tradición sobre pedir la mano de la princesa finalmente rompió la buena relación entre madre e hija.
Harris, Hubert y Hamish
Los hijos de los monarcas Fergus y Elinor, un trío de pequeños rufianes que sólo piensan en comer, bromear y causarle dolores de cabeza a su padre y a la cocinera. A pesar de su corta edad y su espíritu travieso, los niños terminan siendo de gran ayuda para la princesa Mérida; junto con el rey son quienes por mucho rato “roban cámara” en Valiente con sus puntadas y peripecias.
Sumado a la familia real tenemos a los líderes de los clanes y sus respectivos hijos: Dingwall, MacGuffin y Macintosh, quienes a pesar de ser meros personajes secundarios, contribuyen a aligerar la tensión cuando es necesario y a participan en varias, sino es que en las mejores, bromas de la película. La magia de Valiente pasa por la riqueza de sus personajes y difícilmente uno desmerece, incluso aquellos que aparecen sólo un par de minutos tienen algo que contar y con lo cual hacen sonreir (o carcajear) al espectador.
Valiente es perfección animada
El otro punto fuerte en esta cinta animada es la calidad de su producción. Al ver Valiente uno pudiera pensar que Pixar representa sus historias de manera caricaturesca sólo porque así lo desean. La riqueza gráfica en escenarios foto realistas y los miles de detalles en los personajes -desde su vestimenta hasta las arrugas- hacen de este largometraje un espectáculo de animación por sí mismo y la mejor producción, visualmente hablando, del estudio.
Las interpretaciones musicales y vocales están en el mismo tenor, siendo de las mejores bandas sonoras de la productora, con temas que no sólo se escuchan bien dentro de Valiente, sino que invitan a ser escuchados fuera de la película. ¿El doblaje en español? Como siempre, excelente.
Una producción prácticamente perfecta, personajes entrañables y revivir en tiempos modernos los olvidados cuentos de hadas es la mejor carta de presentación de Valiente. Los directores, Mark Andrews y Brenda Chapman se las ingeniaron para convertir un cuento simple en una aventura para chicos y grandes, que a pesar de dicha simplicidad, encierra una atrevida moraleja sobre la comunicación entre madres e hijas.
Estamos ante una comedia de fantasía poco pretenciosa, pero que nunca peca de aburrida e invita al espectador a disfrutar una de las historias familiares mejor contadas en lo que va del año. Valiente es la película más Disney de Pixar, lo cual no es necesariamente malo, pues la “combinación” refrescó un género infantil venido a menos y convierte a este largometraje en la mejor opción en cine animado para este verano.